1 Amanda estaba sentada con sus amigas a la salida de la escuela. Estaban comentando sus resoluciones de Año Nuevo y hojeando revistas. De repente, Amanda se puso de pie y entró corriendo al edificio vacío de la escuela. Su mejor amiga, Cami, la siguió y la encontró sentada en el piso del corredor.
2 "Hey, Amanda, ¿qué te ocurre?" preguntó Cami.
3 "¡Me siento tan gorda en comparación con todas ustedes!" Amanda estalló en llanto. Cami se quedó sin palabras. ¿Por qué rayos estaba Amanda tan alterada? Cami rodeó a Amanda con sus brazos. "No entiendo por qué estás tan molesta", dijo Cami. "Eres la más bonita de la escuela".
4 "No tienes que mentirme", replicó Amanda. "Sé que todas ustedes piensan que soy gorda".
5 Cami miró a Amanda estupefacta. A nadie se le ocurriría jamás pensar que Amanda era gorda. No era toda huesos ni tampoco lo que uno considera flaca, pero... ¿gorda? ¡De ninguna manera! "¿Quién te dijo que eres gorda? ¡Eso fue sencillamente malvado! ¡No es cierto, Amanda!"
6 "Nadie tuvo que decir nada. Puedo verme en el espejo. Todas ustedes tienen vientres tan planos y agradables. El mío está tan caído. Y ya no me queda ninguno de mis jeans. ¡Apenas puedo abotonarlos!" Y en ese momento Amanda comenzó a llorar en serio. Sobre su regazo había una revista. Estaba abierta en un artículo sobre resoluciones de Año Nuevo. Cami tomó la revista y comenzó a leer el artículo. Tenía una gran sección sobre dietas.
7 "Amanda, ¿es esto lo que estabas leyendo?" preguntó Cami.
8 "Tiene algunas ideas geniales para perder 10 libras en una semana. Si intento seguir dos a la vez, ¿crees que puedo perder 20 libras en una semana?"
Paragraphs 9 to 23:
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