1 El 8 de diciembre de 1542, nació en Escocia una joven princesa. María Estuardo (su nombre en inglés se escribía Stewart o Stuart) llegó al mundo en el Palacio de Linlithgow y era hija del Rey Jacobo V de Escocia y su esposa, María de Guisa. El padre de María era el último hombre de la línea real de los Estuardo. Cuando él murió, seis días después de que ella naciera, la pequeña bebé se convirtió en reina. Los regentes de Escocia firmaron un tratado con Inglaterra en ese momento. En una de las condiciones de los Tratados de Greenwich se prometía que María se casaría con Eduardo, el hijo del Rey Enrique VIII. La madre de María se oponía al casamiento y escondió a la niña para prepararla para su coronación. La bebé fue coronada reina de los escoceses el 9 de septiembre de 1543 en una suntuosa ceremonia.
2 Poco después de que María fuese coronada, los Tratados de Greenwich comenzaron a desmoronarse. Enrique VIII intentó hacer cambios que traerían a María a Inglaterra siendo ella todavía muy pequeña. Los escoceses estaban en contra de estos cambios y el gobierno de Escocia rompió el tratado con Inglaterra. Enrique VIII estaba muy descontento con esto y se propuso hacer cumplir el acuerdo por la fuerza. Escocia recurrió a Francia, un antiguo aliado, en busca de ayuda. Se firmó un nuevo contrato matrimonial que prometía a María en matrimonio al Delfín Francisco, hijo de Enrique II de Francia. Enrique II prometía ayuda para Escocia y protección para la joven reina. Después de mucha confusión en Escocia, María partió por mar hacia Francia el 7 de agosto de 1548. Sólo tenía cinco años de edad.
3 En Francia, María recibió una excelente educación. Fue criada en la corte francesa y recibió lecciones de equitación y cetrería. Tomó clases de bordado y música. Cuando tenía quince años, se casó con Francisco. Al año siguiente, Enrique II murió. Francisco fue coronado rey y María se convirtió en reina de Francia.
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